La fiesta de graduación es el punto final a la etapa universitaria, un periodo de estudios de varios años que sirven para afianzar conocimientos y encauzarlos hacia un mejor futuro laboral, pero también para descubrir nuevas amistades y vivir nuevas experiencias en la primera adultez.
Una vez que los días como universitario han terminado, al menos en la primera etapa, ¿qué mejor celebración que un evento festivo para conmemorar todo el esfuerzo? Queda atento a las siguientes ideas para la fiesta de graduación.
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El lugar de celebración
La primera decisión importante es el lugar de celebración. Los locales para fiestas de graduación son muy variados, desde un restaurante que posteriormente ofrezca un espacio para tomar unas copas y bailar a una discoteca, pasando por un hotel o una cómoda terraza si el evento se celebra al aire libre y con buen tiempo.
En todos ellos hay que buscar cierta privacidad, para que la jornada solo reúna a gente que se sienta partícipe de ese momento. A su vez, no hay que olvidar el servicio de catering, la decoración, la música…
Todo debe quedar perfecto. Y recurriendo a esta idea, puede existir la tentación de organizar la fiesta al aire libre, ya sea en verano o durante los últimos meses de primavera. En ese caso, no está de más buscar un espacio accesorio que sea cubierto, para prevenir las posibles inclemencias meteorológicas.
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Trabajar bien en las invitaciones
Otra de las ideas para la fiesta de graduación es hacer unas buenas invitaciones. Si queréis que la jornada sea inolvidable, comienza a prepararla desde antes del mismo evento. Al igual que en las bodas se reparten invitaciones a los asistentes, en los eventos de este tipo hay que hacer lo propio.
En ellas hay que incluir el lugar de celebración, la fiesta, la forma de llegar y detalles importantes como el presupuesto a cubrir o la posibilidad de asistir con invitados y el total de personas que pueden acompañar a cada asistente.
Para el diseño de las invitaciones hay opciones para todos los gustos, pero lo habitual es acudir a un formato sobrio y elegante, con algún recuerdo a la Universidad, con sus colores y algún elemento identificativo del grupo: la promoción, el edificio de la facultad.
¿Qué tipo de banquete es el más aconsejable?
La comida en la fiesta puede servirse en distintos formatos. Al final, una graduación es como una boda, una cena de empresa o cualquier otro evento con muchos asistentes. El banquete adquiere un protagonismo esencial.
Más allá de ajustarse a productos típicos de la zona o decantarse por propuestas más ligeras si es una cena en lugar de un almuerzo, la clave está en decidir entre el típico menú con todos los asistentes sentados, que es la opción más formal; o la alternativa del cóctel, con aperitivos que se sirven de manera ordenada, pero con libertad.
El menú es un formato más acotado, más serio; y las cenas cóctel son más informales, permiten mayor libertad de movimientos. La tercera alternativa es el bufé, que se aproxima más al cóctel, pero con los invitados decidiendo en cada momento qué van a tomar.
No hay fiesta sin música
¿Qué sería de una fiesta sin música? El acompañamiento musical debe acompañar la celebración de graduación en todo momento, desde un pequeño hilo que sirva como generador de ambiente en los momentos de charla y anécdotas a un DJ o un grupo que anime el local una vez termine la cena.
Contratar a un DJ tiene como ventaja la capacidad de ir cambiando de estilo musical en función del grado de animación de los invitados. Pero un grupo, con música en directo, invita a vivir la fiesta con más emoción. Incluso se puede contratar a algún estudiante que tenga su propia banda.
En este punto, conviene no olvidar reforzar el poder de animación de la música con elementos extra como pistas iluminadas, efectos de luces, humo y hasta la participación de los propios asistentes en un formato de karaoke.
Cerrar la fiesta por todo lo alto
Una última propuesta para celebrar este evento es contratar un espectáculo de fuegos artificiales y pirotecnia. Todo ello controlado por una empresa especializada, claro está, y si el sitio lo permite.
Esta misma idea se puede sustituir por espectáculos de luces o incluso por un show de aguas danzantes si hay alguna fuente o estanque en los alrededores. Los más aficionados a la tecnología también pueden proponer una sesión con drones, como ya se vio en los Juegos Olímpicos de Pekín 2020.
Con estas claves ya sabes cómo organizar una fiesta de graduación. Es fundamental que los asistentes se sientan cómodos en todo momento y encuentren respuesta a todas sus demandas. La más importante de todas, divertirse y compartir buenos momentos con sus compañeros.
